Los carmelitas entendemos que nada podemos hacer contra los embates de la naturaleza y que no nos queda más que ser valientes y tener fe en Dios. Es así como hemos enfrentado huracanes, lluvias torrenciales, inundaciones y demás. Pero de lo que ya estamos cansados es de ser también las víctimas de la irresponsabilidad del gobierno, en cualquiera de sus niveles, y en este caso muy concreto de la CFE.
Meses atrás, la CFE ubicó unas nuevas torres de tendido eléctrico, pero no lo hizo en tierra firme sino justo del lado de la playa, cerca del mar, en la zona donde el agua está deslavando aceleradamente la costa. Un error que puede convertirse en tragedia. ¿A qué genio se le habrá ocurrido semejante idea?
A 125 kilómetros al norte de la isla está detenida la tormenta Nate, el primer susto de la temporada, y pronto vendrán más frentes fríos y hasta huracanes, y así como fue instalada la torre de la CFE es cuestión de días para que caiga, con ella reviente el tendido eléctrico y los carmelitas volvamos a quedar sin electricidad sabrá dios por cuánto tiempo. Otra vez a oscuras en todos aspectos. Ya no queremos eso. Ya estamos hartos. Ya basta.